Al investigar la biografía de Javier Villafañe, poeta, escritor y titiritero, que con su carreta La Andariega presentó sus espectáculos recorriendo diversas localidades… surgió una vez más el deseo… “por qué no convertirnos nosotros en titiriteros?
El títere es un recurso valioso porque genera canales de expresión y comunicación, a la vez que posibilita la transmisión de conocimientos de una manera lúdica; acompaña a los niños a lo largo de la infancia, dando vida a personajes y desarrollando su fantasía.
Nuestros alumnos confeccionaron sus propios títeres, a partir de materiales reciclables… y entonces pudimos trabajar también objetivos relacionados con el cuidado del medio ambiente y las posibilidades que da el reciclado, en un trabajo de intercambio entre la familia y la comunidad educativa.
Escuchar narraciones, rimas y poesías a través de los títeres, son herramientas fundamentales para el desarrollo del lenguaje. Felicitamos a nuestros titiriteros y al equipo docente de los grupos de 1° B y 2°B del Nivel Posprimario.
Los familiares de los alumnos, vinieron a construir títeres con nosotros. Para inspirarnos, utilizamos la canción de Luis Pescetti “La Barca”… escuchando la letra, identificamos a los personajes y… el material de desecho se convirtió en títeres, muy graciosos y originales.